Los socialistas exigen la paralización inmediata del derribo y la protección a través de la catalogación patrimonial del edificio de Gaspar Bennàssar en la calle 31 de diciembre de Palma

Los grupos socialistas en el Consell y en el Ayuntamiento de Palma exigen al Consell de Mallorca que haga cumplir al municipio el acuerdo de la Comisión Insular de Patrimonio que impone la protección de diferentes elementos patrimoniales de la edificación del arquitecto Gaspar Bennàssar en la confluencia de las calles 31 de diciembre y Antoni Marquès de Palma.

"El edificio está a punto de desaparecer completamente por la inacción del Consell y del Ayuntamiento de Palma", lo cual supondría un atentado patrimonial de primer nivel, al tratarse de un edificio centenario, de estilo modernista, con valores patrimoniales que ha destacado la asociación ARCA.

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El Grupo Socialista en el Consell de Mallorca ha presentado un requerimiento formal al Departamento de Patrimonio Histórico para detener el derribo inminente del edificio situado en la calle 31 de Diciembre, n.º 27, esquina con Antoni Marquès, en Palma, y hacer cumplir el mandato de protección aprobado en la Comisión Insular de Patrimonio.

Denuncia de Incumplimiento

El Ayuntamiento de Palma no ha incluido el edificio de Bennàssar en el catálogo de patrimonio de la ciudad y, por lo tanto, no ha interrumpido la licencia de demolición que afecta al conjunto. Todo esto, a pesar de que la Ponencia Técnica de Patrimonio Histórico emitió un informe favorable a la protección, al menos de la fachada, las baldosas y los elementos de madera de la estructura, en enero de 2025.

Un informe que fue ratificado por la Comisión Insular de Patrimonio por unanimidad, y posteriormente la asociación ARCA solicitó su catalogación como Bien Protegido. A pesar de todo esto, el Ayuntamiento de Palma no ha aplicado las medidas acordadas. La licencia de derribo continúa vigente y los promotores pretenden ejecutarla de manera inminente.

Joan Ferrer, consejero socialista en el Consell de Mallorca, ha afirmado “no entender la inacción del Consell de Mallorca por no exigir al Ayuntamiento el cumplimiento del mandato de la Comisión de Patrimonio y exigir la paralización de la demolición”, cuando ya podría haber actuado de oficio.

El inmueble, proyectado por el arquitecto Gaspar Bennàssar en el año 1926, es considerado un ejemplo destacado del patrimonio arquitectónico modernista de la ciudad. "ARCA ha defendido ante la Comisión de Patrimonio del Consell los valores arquitectónicos externos como la fachada y otros elementos de la construcción, como el pavimento hidráulico y la carpintería”.