La crisis sanitaria por la COVID-19, ha provocado, y todavía provoca, el aumento de familias que han necesitado y necesitan ayuda por parte del Ayuntamiento para hacer frente al día a día.
Esta crisis no ha sido solo sanitaria, sino que también ha afectado la parte social y económica de un mayor número de ciudadanos que han tenido que solicitar ayuda al Ayuntamiento.
Los y las socialistas, desde el inicio de la pandemia, hemos tenido la firme decisión de no dejar anadie atrás, sin cometer los errores del pasado, cuando la derecha gobernaba no sólo no aumentaban las ayudas, sino que las recortaban.
Por eso, y desde el primer momento, el Ayuntamiento aumentó el presupuesto destinado a ayudas económicas para la ciudadanía pasando de los 4 millones de euros destinados en 2019, a los 10 millones y medio del año 2021 hasta llegar a los más de 11 millones del 2021, lo que supone un aumento de un 182,6% en 2 años y representa que el Ayuntamiento de Palma ha otorgado ayudas a casi 7.000 familias de la ciudad.
El grosor de las ayudas se ha destinado principalmente a necesidades básicas (alimentación, productos de higiene,...) y vivienda (pagos de alquiler, ayudas para cubrir deudas y prevenir desahucios), si bien una parte ha ido destinada a otras ayudas como becas de infancia, de inserción formativa laboral, mantenimiento del hogar. Todas estas ayudas forman parte del catálogo de prestaciones sociales del Ayuntamiento de Palma, que es uno de los más amplios de todos los municipios del Estado y que se reforzó cambiando el modelo de atención social y supuso una mayor agilidad en la gestión de los trámites.
Por otro lado, el número de familias que han solicitado ayudas ha disminuido, pasando de las 9.688 del año 2020 a las 6.941 del año 2021, pero se ha aumentado el presupuesto porque muchas de estas familias han pasado a una situación de pobreza crónica, es decir, necesitan prestaciones estables, de larga duración, para poder cubrir sus necesidades básicas vitales que no se llegan a cubrir con las prestaciones garantizadas (Ingreso Mínimo Vital, Renta Social Garantizada,...) por el alto nivel devida a ciudad. La situación es diferente de la del año 2020 en el que las ayudas solicitadas eran puntuales, por este motivo el número de familias solicitantes era más elevado.